Son uno de los elementos que debemos incluir cuando nace un bebé: un moisés o una minicuna. Pero en realidad no sabemos cuál es el más ideal y qué diferencias hay entre un moisés y una minicuna. Tranquila, aquí te las diremos. Lo que más diferencia entre un moisés y una minicuna es el tamaño
Viene un bebé en camino y surge la duda de toda madre y padre. Una de las primeras decisiones a tomar cuando nazca el bebé es dónde dormirá. Son primerizos y en realidad no saben qué hacer. Piden consejos, pero cada quien dice su opinión, entre familiares y amigos. Tanto el moisés como la minicuna son muy parecidos, pero tienen sus diferencias.
Los moisés
Un moisés es una especie de canasta hecha de mimbre que cuenta con unas asas y patas que lo soportan. Estas últimas pueden llevar ruedas o no, ser de hierro o de madera. Sus medidas estándar son de 80×40 cm y la profundidad del canasto es de 25 cm. Los moisés pueden ser hechos de otros materiales pero el más común es el del mimbre.
Los moisés por lo general lo venden junto con una ropa de cama, una cubierta de tela que sirve como capucha y su respectivo colchón. Lo puedes colocar directamente en el piso o apoyado con sus patas. Entre los beneficios de un moisés están: la seguridad que le proporciona al bebé, es ligero, ocupa poco espacio, sus asas hacen fácil trasportarlo, es más económico que una cuna, puedes colocarlo como quiera (en el suelo o sobre sus patas).
Las minicunas
Las minicunas son una especie de cuna y moisés, tienen un tamaño intermedio entre ambas, de 50×80 cm y una profundidad de 30 cm. También pueden llevar ruedas o estar sobre un soporte con patas.
¿Cuáles son sus diferencias?
El moisés suele ser ligero y es fácil de manipular. Con él se puede trasladar el bebé en las primeras semana con mayor facilidad, de un sitio a otro. Por otro lado, los moisés no son muy duraderos precisamente por su tamaño pequeño. No aporta mayor estabilidad como sí lo hace una minicuna.
Entre tanto las minicunas, son de mayor tamaño que los moisés, por lo cual duran más tiempo. Sin embargo, no poseen la movilidad que sí tiene un moisés, porque no puede separarse la canasta de las patas. Su tamaño resulta ideal para ocupar espacio en el cuarto de los padres, así pueden estar pendiente de su bebé durante la noche. Quizás es la principal ventaja que ven para adquirir una, pero no la única.
Hay unas minicunas con forma de tijeras, que las hacen desmontables y que no ocupan mucho espacio al guardarlas. En cambio, el moisés no es desmontable, mantiene el tamaño del canasto, por lo cual ocupa más espacio al guardarlo.
Los moisés y las minicunas se pueden usar mientras el bebé no pueda caminar entre sus manos y rodillas o sentarse solo. Soportan un peso de hasta 9 kg. Además, como durante los primeros meses los bebés duermen mucho, una minicuna o un moisés son ideales por su pequeño tamaño. Además, puedes ubicarlo en cualquier sitio de la habitación, tenerlo tan cerca de la cama de los padres para facilitar su debido amamantamiento y observación.
Una de las opciones es la minicuna colecho con la que la madre puede estar muy cerca del bebé. El diseño de este tipo de minicuna se da para que se pueda unir a la cama, cerca de la madre. El bebé dormirá junto a la cama pero usando su propio colchón.
Los bebés por lo general les gusta sentirse seguros, acobijados y acurrucados, por tanto un moisés o una minicuna los hará sentir así. Por otro lado, las minicunas al ser desmontable pueden transportarse fácilmente con la bolsa de viaje con las que suele venir. Es probable que el bebé duerma mejor si lo hace desde su propia minicuna.
El moisés también es fácil de transportar, pero debido al capazo puede ser muy incómodo meterlo en la maletera o en el avión, si de paso hay que llevar otras cosas en él. Si el médico determina durante el embarazo que el bebé será grande, hay que tomar en cuenta que un moisés tendrá una vida útil hasta que tenga 3 a 4 meses y la de la minicuna hasta la edad de 6 a 8 meses.
La minicuna al darle esa sensación acurrucada al bebé suele ser una buena opción en su transición a una cuna, es más duradera que un moisés.
Consejos para adquirir un moisés o una minicuna
En el caso de un moisés:
- Debes comprar uno que sea plano y duro.
- Sus bordes deben tener una distancia de 28 cm.
- El colchón debe estar envuelto en una tela hipoalergénica de preferencia.
- Trata de que sea lo más ancho posible para que tu bebé esté más cómodo.
- Si tiene patas que sean fácilmente plegables y resistentes.
- Toma en cuenta que los moisés no son cómodos para llevar en el coche.
- Si el moisés es de mimbre verifica si no hay astilla alguna que sobresalga y pueda lastimar al bebé.
Ahora si lo que quieres es comprar una minicuna, toma en cuenta lo siguiente:
- La seguridad del bebé es la prioridad, por tanto hay que asegurarse que tenga bordes altos para que no pueda subirse. Lo recomendables es que sean de 27,5 cm.
- Verifica que no esté pintado con alguna pintura de olor fuerte o tóxico.
- Que el bebé tenga movilidad también es importante, por lo cual debemos asegurarnos que sea transportable.
- Toma en cuenta para eso el peso y si tiene ruedas. Al preferir las de ruedas, asegúrate que tenga algún tipo de freno para que no se desplace si el bebé ya empieza a moverse.
- El colchón de la minicuna que elijas debe ser transpirable y firme. Trata de incluir en ella algún tipo de almohada para el bebé, de tal manera, que su cabecita se mantenga algo elevada y así facilitar su respiración.
- Las minicunas deben ser de fácil limpieza y extraíble su interior porque normalmente los bebés acostumbran a regurgitar y por tanto hay que sacar el colchón y sus fundas para asearlos y volver a colocarlo con facilidad.