Sin lugar a dudas un buen colchón es lo que nos garantiza un descanso confortable. También los niños lo requieren, aunque sus necesidades son específicas a la hora de dormir, porque es cuando entran a la etapa de crecimiento y desarrollo. En este post te hablaremos si es adecuado un colchón viscoelástico para los niños.
Las mamás y los papás a veces pasan mucho tiempo discutiendo qué colchón es el mejor para su hijo; pero también dedican un buen rato pensando en cómo decorar la habitación. Sin embargo, es importante determinar cuál es el mejor colchón para nuestro hijo. Debemos asegurarnos que dormirá cómodamente en él y que no le genere ningún problema de salud; tomando en cuenta lo que dice la SER (Sociedad Española de Reumatología) el 80% de la población española presenta dolor de espalda en algún momento de su vida.
Conviene que nuestro hijo duerma en un colchón viscoelástico
¿Cómo sabemos si un colchón viscoelástico es conveniente para nuestro hijo? Para responder a esta interrogante ten presente que este tipo de colchón no suele ser únicamente de ese material. Pueden tener un núcleo de muelle o de espumación HR (acolchado o de varias capas de visco). Además, una de sus principales características es que es adaptable al cuerpo sin que se haga presión sobre él; distribuye bien el peso, de esta manera la columna vertebral estará alineada y se mantendrá saludable.
Por otro lado, es necesario saber que la viscoelástico presenta una sensación envolvente que dependerá de la densidad del material. Lo más adecuado para niños es que el colchón sea firme pero que no sea muy envolvente y; además debe acoplarse a la forma corporal del niño según la etapa de crecimiento en la que está.
Colchones adecuados para niños según su etapa
Los recién nacidos duermen muchas horas, por lo tanto, un buen colchón para ellos es aquel que sea firme y cómodo. En este sentido, el que mejor se adapta a la cuna es aquel que permite que el bebé duerma bien sin que genere puntos de presión. Pero también, que no sea muy blando para que pueda moverse y no se hunda en él.
Por lo antes expuesto, lo mejor es usar un colchón de muelle. Quizás la viscoelástica no resulte tan conveniente porque, aunque distribuye los puntos de presión no son muy firmes. El acolchado está bien, pero lo mejor es que tenga un núcleo firme y transpirable, como son los de muelle. La viscoelástica con espuma o espumación HR en su núcleo puede ser lo suficientemente adaptable y firme; pero no cuenta con suficiente transpirabilidad.
Una excelente característica de los viscoelásticos es que dan una sensación de ingravidez y además; distribuye bien el peso de la cabeza del bebé, por lo cual se evita que sufra el llamado Síndrome de Cabeza Plana. Además, el material viscoelástica proporciona confortabilidad en los músculos del bebé, haciendo que se relaje y favorezca la circulación sanguínea. Otra ventaja es que es un material transpirable lo cual facilita que circule el aíre, dándole frescura al colchón.
Durante la fase de crecimiento, específicamente entre los 3 a 8 años, es importante el sueño porque influye en su crecimiento. En este sentido, el colchón debe permitirle fácil movilidad sin que afecte la columna del niño, es por eso que la mejor opción es un colchón viscoelástico. Pero debes saber que, por razones de peso, la firmeza se debe evaluar en la medida que vaya creciendo.
Qué son los colchones viscoelásticos
El material de estos colchones es sintético y fue desarrollado por la Nasa en los años 60, usado en los trajes de los astronautas para amortiguar los golpes. Ya en los años 90 empezó a usarse en el sector textil por sus características resistentes y flexibilidad para amortiguar golpes y movimientos. Cada vez este material es más usado en el sector de descanso por sus beneficios para un descanso saludable: una combinación de firmeza y adaptabilidad. Sin embargo, es necesario conocer los diversos tipos de viscoelástica, las características y las densidades que ofrecen, es así como lo valoraremos.
La densidad de un viscoelástico viene siendo la cantidad de material en kilogramo por cada metro cúbico (Kg/m3). No obstante, de acuerdo a esa densidad usada en la fabricación del colchón se sabrá las prestaciones que ofrece. Se dice que, cuanto mayor se la densidad, la sensación viscoelatica y de adaptabilidad será mayor, por lo cual habrán mejores resultados. Sin embargo, hay quienes prefieren una adaptabilidad media, optando mejor por una densidad media.
La densidad más baja que se puede encontrar es aquella en el que su núcleo viscoelástico comprende entre 18 a 20 Kg/ m3. Además, la media va entre 30 a 40 Kg/ m3 y la alta sobrepasa los 50 Kg/ m3.
Ventajas y desventajas de un colchón viscoelástico
Entre las ventajas de un colchón viscoelástico están:
- Al igual que los de látex, los viscoelásticos combinan bien firmeza con flexibilidad, los cuales permiten la adaptabilidad del cuerpo.
- Es transpirable, característica que proporciona su material poroso.
- Amortigua rápidamente los movimientos de la cama, esto hacen que sean muy cómodos.
- Duran por mucho tiempo, incluso pueden superar los 10 años.
Sin embargo, a pesar de sus grandes ventajas, presenta algunas desventajas:
- Son muy costosos, al igual que los de látex y difíciles de encontrar.
- Por la sensación de gravidez, de estar flotando en el aire, no se recomienda a los que sufren de vértigo.
- Este tipo de colchón incluye fibra atérmicas y algodón para que el núcleo no sea tan caliente.
A primera vista podemos determinar que el colchón más adecuado para niños es el de núcleo viscoelástico. Sin embargo, actualmente hay fabricantes de colchones de muelle que son muy buenos, así como los hay viscoelásticos con apenas unos centímetros de ese material en su núcleo.
También, hay otros materiales que pueden ser usados por el público infantil, por ejemplo, aquellos de fibra de coco; cuya desventaja viene siendo su alto precio y que proporciona casi los mismos beneficios que proporcionan los látex y los viscoelásticos.