Las primeras comidas de cualquier niño son una de las etapas más significativas. Para lograr que ellos se alimenten correctamente se buscan diferentes recetas y opciones. Por ello aprender cómo hacer un buen puré de verduras para bebés es primordial. Se trata de una opción nutritiva y que lo ayuda a experimentar con deliciosos sabores. Igualmente es una forma de acostúmbralos a probar de todo desde sus primeros períodos alimenticios.
Hay diferentes purés para bebés y no necesariamente tienen que llevar lo mismo. Al igual que ocurre con los adultos, los pequeños también quieren probar algo delicioso y nuevo. Por ello conocer distintas formas de prepararlos es una manera de tener varias posibilidades.
Un buen puré de verduras debe ser hecho a base de ingredientes frescos. Lo mejor es evitar elementos que lleven mucho tiempo refrigerados o en la tienda. Igualmente aquellos que lleven conservantes quedarán descartados por completo. Recuerda que se trata de la alimentación de tu bebé, por lo que debe ser lo más natural posible. De esta forma se estará protegiendo su estómago a medida que va en crecimiento.
¿Cuándo comenzar?
Es importante saber reconocer el momento ideal para comenzar la alimentación completaría. A partir de los 6 meses es que el bebé comenzara a experimentar los distintos sabores. Si se le quiere dar cualquier puré de verduras o comida se deben tener ciertas reglas presentes. Aunque lo importante es que el pequeño pruebe lo que más pueda y así poder nutrirse de la forma apropiada.
En un principio se comienza con un ingrediente a diario, es decir con una sola verdura. La idea es prevenir cualquier reacción alérgica a lo nuevo que está entrando a su organismo. Se recomienda entonces probar durante dos o tres días y cambiar a otro alimento luego de ello.
Existen algunas verduras, como la zanahoria o la patata, que son mejores para comenzar que otras. Igualmente hay que pelarlas y lavarlas muy bien, procurando su mayor frescura posible. Es primordial observarlas muy bien para evitar alguna parte en mal estado.
Purés de verduras según sus etapas
Precisamente hay purés que son mejores que otros para los niños más pequeños. La organización mundial de la salud ha determinado que la mayoría de los vegetales pueden ser ingeridos a partir de los 6 meses. A pesar de ello hay ciertas precauciones que no deben dejarse de lado. Algunas de ellos en relación a sus efectos, cantidades o combinaciones.
Particularmente para los bebés que comienzan son ideales lo purés de verduras como calabacín, zanahorias, patatas (en sus diferentes presentaciones), puerros, calabaza, judías, entre muchas otras. Las mismas se pueden dar individualmente, para luego combinarlas más adelantes. Son sabores que se matizan unos con otros y que saben muy bien juntos.
A partir de que se han probado distintas combinaciones e verduras se les puede complementar con proteínas. Con pollo y carne también se pueden lograr un buen puré para bebé, siendo este muy nutritivo. Incluso después de los diez meses algunos pescados también son bastante aceptables.
Más adelante, a partir de los diez meses aproximadamente se incluirá en su dieta coliflor o repollo. En esta variedad se cuentan todas las que sean de hojas verdes, pero sin exceder en las cantidades. La idea es que el niño se adapte a las mismas de la forma correcta. Esto también incluye las legumbres y los granos, con los que se pueden hacer excelente preparaciones.
Los purés más populares entre los bebés
Existen purés que son más populares que otros entre los bebés y se recomiendan para el inicio de la alimentación. Uno de ellos es el de calabacín, patatas y cebollas, el cual es bastante delicioso. La calabaza también resulta muy agradable, por lo que se combina con puerros y vegetales como el cilantro. Todos son buenas opciones y un complemento de sabores, junto con nutrientes, que a ellos les encanta.
Otro buen puré de verduras para bebés es el de zanahorias. El mismo se prepara sumándole cualquier tubérculo de tu elección y un poco de perejil para darle mayor sabor. El tradicional de patatas no se puede dejar de lado, al combinarlo con aceite de oliva y leche materna o fórmula para las primeras etapas. Las preparaciones no tienen que ser muy elaboradas, es suficiente con poner los vegetales al vapor o en agua hirviendo.
Los sabores dulces también son bastante populares y un buen puré de batata lo demuestra. La misma puede combinarse con calabacín o patatas para una mezcla de sabores ideal.
Purés de verduras de diferentes colores
Un buen puré para bebés es aquel que tenga diferentes colores. Hay que recordar que no solamente incluye el sabor, también es importante como se vea. Por ello siempre es bueno que se mantenga la esencia de cada vegetal y de este modo llamar su atención. Lo pequeños sentirás un gran interés si ven tonos como el naranja, verde, amarillo o morado en sus platillos.
Algunos detalles que no hay que olvidar
Antes el año de edad no se le puede colocar sal a ningún puré, porque el organismo de los bebés no está preparado para la misma. Por ello lo mejor es hacer diferentes combinaciones y usar verduras que le den sabor de forma natural. Esta regla también influye en cuanto a caldos y componentes químicos de cualquier tipo. Nuevamente en cuanto a la alimentación infantil debe ser lo más natural es lo mejor.
Por otro lado no hay que rendirse en cuanto a la alimentación de los bebés. Puede que en principio el mismo rechace alguna vegetal, pero vuelve a intentarlo de nuevo otro día. No hay que dejarse vencer al respecto ya que a esta edad cambian mucho de parecer. Esto último hace que lo que hoy no le guste, le sea mucho más agradable más adelante.
Un buen puré de verduras para bebés debe estar hecho con mucho cariño. Ese es el ingrediente más importante, junto con la paciencia para dárselo. Del resto hay muchas recetas posibles con la gran variedad de vegetales que existen en el mundo. Por lo que tu hijo no se quedara sin probar nuevos elementos, tan solo hay que ofrecérselos. El comienzo de alimentación es una gran etapa de aprendizaje, por lo que hay que aprovecharla de la mejor manera posible.